Cambiando el Juego: Inteligencia Artificial Generativa en el Mundo Actual
junio 30 ,2025
junio 30 ,2025
BritCham Chile convoca a líderes del sector público, privado y académico para abordar los desafíos éticos, regulatorios y sociales de la IA
Santiago, 25 de junio de 2025 – En un contexto marcado por la rápida evolución tecnológica y la necesidad urgente de marcos regulatorios, la Cámara Chileno-Británica de Comercio (BritCham Chile), a través de su Comité de Tecnología, Innovación y Ciencias (CTI), realizó el conversatorio “Cambiando el Juego: Inteligencia Artificial Generativa en el Mundo Actual”. El evento tuvo lugar en las oficinas de BritCham Chile en Las Condes y reunió a representantes del mundo público, académico y corporativo para reflexionar sobre el impacto de la IA generativa (IAG) en la sociedad, la industria y la política pública.
La sesión fue moderada por Joanna Pérez, presidenta del Comité CTI, quien destacó que “la conversación sobre IA ya no es futurista, es urgente y actual. Tenemos el deber de construir una hoja de ruta que permita su desarrollo ético, inclusivo y estratégico para Chile”.
Cristina Flores, Coordinadora Técnica de Tecnologías Emergentes del Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación.
Dr. Gonzalo Farías, Director del Laboratorio de Inteligencia Artificial de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
Leonardo Morley, Chief Information Officer (CIO) de HSBC Chile.
El panel comenzó con una introducción técnica y conceptual a cargo de Cristina Flores, quien explicó que la IA generativa es una subdisciplina que permite a las máquinas emular capacidades cognitivas humanas como el lenguaje, la percepción y la creación de contenidos. Flores destacó la necesidad de democratizar el conocimiento técnico sobre esta tecnología, impulsando la alfabetización digital a nivel ciudadano: “Hoy más que nunca debemos entender cómo funcionan los modelos de machine learning y cuáles son sus implicancias sociales”.
Por su parte, el Dr. Gonzalo Farías abordó el salto cualitativo de la IA en los últimos años: “Estamos ante sistemas capaces de generar imágenes, textos o videos indistinguibles de lo humano, pero que no son copias, sino creaciones nuevas basadas en datos previos. Esto transforma industrias, pero también desafía marcos regulatorios tradicionales”.
Leonardo Morley enfatizó el impacto práctico de la IA en las empresas y la vida cotidiana, mencionando ejemplos concretos desde el sector financiero hasta el uso masivo de asistentes virtuales: “La IAG ya forma parte del día a día: desde el diseño gráfico hasta la automatización de procesos. Lo esencial es mantener al humano como centro del juicio crítico en cualquier aplicación”.
Flores también explicó que en mayo de 2024 se logró un hito importante con la presentación del primer proyecto de ley sobre inteligencia artificial en Chile. El marco establece un enfoque basado en riesgos y contempla principios como la transparencia, la explicabilidad, la intervención humana y la protección de derechos fundamentales. “No podemos hablar de una IA neutral. Toda tecnología refleja las decisiones humanas que hay detrás, por eso el rol de la regulación es fundamental”, subrayó.
Gonzalo Farías complementó: “Es crucial que las normativas sean evolutivas. Esta tecnología cambia en meses, no en años. Lo que hoy es vanguardia, mañana puede quedar obsoleto”.
Los panelistas coincidieron en que uno de los mayores desafíos de la IAG es el sesgo algorítmico. Flores y Farías compartieron ejemplos concretos de sesgos de género y raciales en modelos de selección de personal y reconocimiento facial. Se destacó que incluso las aplicaciones diseñadas para tareas neutrales pueden perpetuar discriminaciones si no son cuidadosamente auditadas.
“El sesgo cero no existe”, afirmó Flores, “pero sí podemos crear modelos que identifiquen y corrijan estos sesgos con entrenamiento específico y participación humana”.
Uno de los temas más comentados en la ronda de preguntas fue la seguridad de los datos en contextos empresariales. Leonardo Morley enfatizó que “las empresas deben ser extremadamente cautas: al usar plataformas públicas como ChatGPT o Google Bard se puede exponer información sensible sin saberlo. En HSBC, por ejemplo, desarrollamos modelos propios y cerrados para garantizar la confidencialidad”.
En cuanto a la sostenibilidad, Gonzalo Farías alertó sobre el alto consumo energético y de agua que requiere entrenar modelos de IA, proponiendo como solución el uso de energías renovables y la futura incorporación de computación cuántica para reducir la huella ecológica.
La jornada concluyó con una invitación de BritCham a continuar promoviendo conversaciones intersectoriales y formación ética en el uso de tecnologías disruptivas. Como señaló Joanna Pérez, “la inteligencia artificial no puede reemplazar el juicio humano, pero puede potenciarlo. Nuestro desafío es definir cómo, cuándo y con qué límites”.
El video completo de la sesión y la encuesta de evaluación están disponibles en www.britcham.cl, en la sección del Comité de Tecnología, Innovación y Ciencias.